Todos conocemos la delicada situación en la que ha caído General Motors, no saben que hacer para lograr salir de esta crisis en la que han entrado, y aunque han tenido la respuesta siempre en sus manos, creo que la solución la han concretado muy tarde.
Tienen bajo la manga a Volt, un coche híbrido con unas prestaciones extraordinarias, que muchos han bautizado como el híbrido entre el Toyota Camry y el Honda Civic pero eléctrico.
Es un coche genial, usa un motor de gasolina cuya única utilidad es la de cargar las baterías que realmente mueven el coche. Posee una autonomía cercana a los 400 km (aquí es donde saltan las alarmas de todos los defensores de los coches de gasolina, que no se sienten seguros si no alcanzan los 500 km, un razonamiento ilógico si pensamos que en promedio un 90 % de las veces que usamos el coche son para viajes menores a los 60 km). Y además es capaz de cargarse desde la red eléctrica de casa con un simple conector de corriente normal.
Además si observamos su interior, nos daríamos cuenta de que no sólo ofrece tecnología en el motor, sino un espacio interior equipado con comodidades como navegador de bordo, asientos inteligentes, regulador de temperatura y GPS entre otras cosas.
A ver si no comenten el mismo error que cometieron con el EV1, para aquellos que no lo conozcan y dispongan de tiempo, os paso un buen documental que podéis ver entero desde aquí y os dará una idea muy buena de cómo se están repitiendo ciclos del pasado y cómo estuviéramos a día de hoy en cuanto a tecnología alternativa, si los protagonistas y los hechos hubieran ocurrido de otra manera.
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